domingo, 19 de enero de 2014

Banding Peregrine Falcons Part One

 Esta es otra excursión anillando peregrinos migratorios que efectúo junto a Oscar Beingolea y Piero Ravina, la secuencia de fotos de esta oportunidad posee tres (3) partes. Si algo he considerado luego de este viaje, es que los halcones jóvenes se desplazan constantemente hacia otros terrenos de caza en mayor ocurrencia que los adultos, aunque ciertamente nos hemos vuelto a  ver con halcones jóvenes en el mismo pedregal o roquerío en los que los hemos encontrado y anillado anteriormente. Las imágenes en algunas ocasiones son más elocuentes que las palabras, y ahora mismo, lo es así sin duda.



Este fue el primer macho migratorio joven que fue anillado, se encontraba descansando sobre la arena cerca del camino. 




Macho migratorio si se quiere, de “plumaje típico”.




Luciendo la anilla identificatoria.




Con cierta frecuencia los peregrinos silvestres poseen lesiones corporales, este ejemplar en particular tenía una cavidad interpuesta entre el inicio del pico, la cera y los orificios nasales.


Hembra migratoria joven anillada en otra oportunidad y que nos vino a dar el encuentro, nótese el buche.









Y dicen que los hombres son elegantes.




El macho joven de la lesión ya liberado.







Cuando imagino una orgía, viene a mi mente algo tan barroco y ampuloso como esta imagen. Un hermoso “desorden”.





















Me desvinculo del mar
cuando vienen las aguas a mí.
Salgamos siempre. Saboreemos
la canción estupenda, la canción dicha
por los labios inferiores del deseo.
O prodigiosa doncellez.
Pasa la brisa sin sal.

A lo lejos husmeo los tuétanos
oyendo el tanteo profundo, a la caza
de teclas de resaca.

Y si así diéramos las narices
en el absurdo,
nos descubriremos con el oro de no tener nada,
y empollaremos el ala aún no nacida
de la noche, hermana
de esta ala huérfana del día
que a la fuerza de ser una ya no es ala.

VALLEJO










Cangrejo, amigo mío.




Macho migratorio adulto capturado casi entrada las 7:00 pm.










En el anillamiento de halcones adultos, corresponde la colocación de dos anillas.







Oscar luego de la liberación, anotando la ubicación de la captura en el GPS, el peso, la medida de tarso, ala, cola, el número de las anillas y otra información que considere atendible. 





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